Composición visual
Todo diseño que vayamos a realizar debe tener un orden, es decir una buena composición visual. Este orden en algunas ocasiones puede venir determinado dependiendo de la persona que diseñe. Sin embargo, si seguimos una serie de recomendaciones podremos conseguir todos una perfecta composición visual:
– Encontrar el foco: Este es un aspecto fundamental en toda composición. El punto focal ayuda al espectador a fijar la mirada en lo más importante del diseño o de la imagen, desde el primer momento.
– Líneas a través de los objetos: Podemos dirigir la mirada a las líneas que se forman a través de los objetos y que la cámara puede captar. De esta manera, si aprovechamos este aspecto podremos conseguir una correcta composición.
– Jerarquía: Si tenemos clara la jerarquía, es decir la posición de los elementos en la composición y el papel que desempeñan cada uno de ellos, podremos crear una buena composición visual. También, debemos tener en cuenta la escala que se utiliza para comunicar la jerarquía al llamar la atención hacia y desde ciertos elementos.
– Equilibrio: A la hora de conseguir equilibrio en nuestro diseño podemos hacerlo a través del equilibrio simétrico, que refleja ciertos elementos de izquierda a derecha o de arriba a abajo, o a través del equilibrio asimétrico, en el cual cada elemento tiene su peso en el diseño.
– Contraste: El contraste nos ayuda a enfocar o desenfocar un elemento.
– Espacios en blanco: Gracias a los espacios en blanco podremos aumentar la claridad de nuestros diseños, así como el aspecto general de las partes que conforman la composición.
– Dividir la composición en tercios: La regla de los tercios es una técnica sencilla que se basa en dividir los diseños en tres filas y tres columnas, y los puntos dónde se cruzan las filas son los centros de coordinación.
Si seguimos estos sencillos consejos conseguiremos que nuestros diseños tengan una correcta composición visual. ¡Esperamos que os sirva de ayuda!